¿Qué comen los búhos?
Búhos típicos y lechuzas, miembros del mismo orden taxonómico, comparten con águilas y halcones la dieta carnívora; no es casualidad que se les llame “aves de presa”. Precisamente, es su alimentación lo que les ha conferido este nombre.
Pese a sus semejanzas con otras aves carnívoras, los estrigiformes han desarrollado hábitos alimenticios distintos de los de otras, dada su situación geográfica, su tamaño y otras adaptaciones de su cuerpo. En pocas palabras, su dieta está en concordancia con su anatomía.
Los estrigiformes cazan una amplia variedad de presas vertebradas e invertebradas, desde mamíferos hasta peces de diversos tamaños. Por lo general, su dieta está compuesta por un gran número de mamíferos pequeños y por un número menor de aves, insectos, reptiles, anfibios, crustáceos, peces y arácnidos como los escorpiones. Los ratones, las musarañas, las ratas, los conejos, los topillos, las liebres, las lombrices de tierra, las ranas, los sapos, las lagartijas y las aves canoras son algunas de sus presas favoritas.
Ratones, musarañas, conejos, ranas y lagartijas son algunas de sus presas favoritas.
Algunas especies cazan más peces y los búhos más grandes no desperdician la oportunidad de cazar alguna cría de ciervo, un zorro pequeño, un zorrillo, un pato e incluso una comadreja. Desde luego, esta es una visión general, pues la dieta carnívora varía de especie a especie. Por ejemplo, el búho cornudo o americano (Bubo virginianus) tiene mayor oportunidad de cazar una liebre que el mochuelo de los saguaros (Micrathene whitneyi) debido a que es más grande. Entre sus presas se cuentan ratones de patas blancas (Peromyscus leucopus), tuzas, ratas algodoneras (Sigmodon hispidus) y liebres de California (Lepus californicus).
Los búhos no tienen dientes, por lo que no mastican a sus presas. Una vez que el animal ha sido capturado, el búho o lechuza tiene dos opciones: desgarrarlo garras y comer los trozos o tragarlo entero, con todo y huesos. Normalmente traga completamente enteras a las presas más pequeñas tales como ratones, pero las más grandes difícilmente cabrían en su garganta.
Las egagrópilas son las partes no digeribles que el ave expulsa por la boca.
Un aspecto curioso de la alimentación de los estrigiformes es el arrojo de materiales llamados egagrópilas. Su estómago no puede digerir todo el cuerpo de las presas, así que, naturalmente, debe salir por alguna vía. Las egagrópilas son las partes no digeribles que el ave expulsa por la boca. Tienen la apariencia de masas compactas con pelo y huesos visibles, y por eso, brindan a los científicos mucha información acerca de la dieta de una especie.
Estrategias de caza
Muchas especies son generalistas, es decir, no se especializan en comer un determinado alimento y se desplazan por su hábitat en busca de presas hasta que encuentran una. Esto es lo que suelen hacer muchos búhos y lechuzas. Para ellos, la búsqueda de comida es un asunto diario, ya que tienen que nutrirse día con día, a diferencia de otros animales que no necesitan comer diariamente.
El búho puede posarse en la rama de un árbol o en un sitio lo suficientemente alto y discreto para observar lo que sucede abajo, o bien, volar a una altura suficiente como para no ser visto ni escuchado. Esas “excursiones” u observaciones son realizadas durante la noche, al amanecer o al anochecer, pero la escasa luz no le produce ningún problema. Su visión es sumamente aguda, y su sentido del oído no se queda atrás. Adicionalmente, su disco facial cóncavo concentra los sonidos de las presas sobre los oídos dispuestos de forma asimétrica, y básicamente le ayuda a escuchar mejor. Algunas especies, como el cárabo lapón, son capaces de detectar una presa solo con el oído, y el búho nival puede encontrar un animal en galerías subterráneas, varios centímetros bajo la nieve.
Las plumas de los búhos y lechuzas están dispuestas de tal forma que el vuelo es silencioso.
Cuando vuelan, lo hacen en silencio. Mientras que a algunas aves las delata el sonido que producen sus alas o sus plumas al pasar a través del aire, la mayoría de los búhos no tienen el problema, porque las plumas están dispuestas de tal forma que el vuelo es silencioso. Esta es una adaptación muy útil. Los búhos son depredadores eficaces, porque están hechos para la caza. Al encontrar su presa, vuelan rápidamente hacia ella y la capturan con sus fuertes garras para después comerla ahí mismo o transportarla a su nido.