Tyto novaehollandiae
Lechuza de campanario enmascarada es el nombre alterno de esta especie, que es poco conocida más allá de su zona de distribución natural. Se ha reconocido al menos 7 subespecies: T. n. calabyi, T. n. kimberli, T. n. melvillensis, T. n. castanops, T. n. galei, T. n. novaehollandiae y T. n. troughtoni.
Orden: Strigiformes
Familia: Tytonidae
Género: Tyto
Descripción
Es una lechuza mediana a grande con patas amplias, pico muy corto y oídos no visibles. Carece de mechones largos de plumas a los lados de la parte superior de la cabeza. Los machos adultos miden entre 33 y 41 centímetros de longitud, y las hembras entre 39 y 50 centímetros; por ende, ellas tienden a ser más grandes que sus contrapartes y esto ayuda a diferenciar los sexos. La subespecie de Tasmania es la más grande de todas.
Por otra parte, ellos pesan cerca de 420-800 gramos, y ellas unos 545-1,260 gramos. La envergadura, o distancia entre las puntas de las alas extendidas, registra alrededor de 1,280 centímetros en las hembras del sur.
El rostro posee un disco facial en forma de corazón de color claro en donde destacan dos ojos oscuros. El pico está cubierto casi por completo por las plumas. El pecho y el vientre poseen plumas blancas a rojizas, en tanto el dorso es marrón y la zona superior está decorada con manchones color marrón oscuro. Alrededor del pico y los ojos, el negro predomina. En realidad, existe mucha variación en el color del plumaje; algunos individuos pueden mostrar hasta tonos anaranjados.
Distribución y hábitat
La especie vive en Oceanía, abarcando Australia, Indonesia y Papúa Nueva Guinea.
La especie vive en Oceanía, en tres regiones: Australia, Indonesia y Papúa Nueva Guinea. El rango total es amplio; está presente en muchísimas zonas no desérticas, por lo que está ausente sobre todo en el centro australiano y en cambio prospera en sus regiones costeras. Nueva Gales del Sur, un estado de Australia, tiene una población de Tyto novaehollandiae muy grande: un 90 por ciento de su territorio es su hogar.
Sus hábitats pueden ser bosques secos de eucalipto, campos abiertos, parques y en general, bosques amplios. En Australia, es abundante en los llanos del oeste, a no más de 300 kilómetros al interior del país.
Alimentación
La lechuza australiana mantiene una dieta carnívora en la que predominan presas como zarigüeyas, conejos, bandicuts, murciélagos, roedores (ratas, por ejemplo) y algunas aves, reptiles e insectos. Por lo regular, caza durante las primeras horas de la noche a lo largo de los bosques e incluso a lo largo de carreteras y prefiere animales terrestres, si bien es tan eficaz que puede capturar animales al vuelo.
Comportamiento
Su agudo sentido de la vista le permite avistar presas incluso en las noches más oscuras.
Esta ave es, como la mayoría de las lechuzas, de hábitos nocturnos. Su agudo sentido de la vista le permite avistar presas a considerable distancia incluso en las noches más oscuras. Una de las formas en que se comunica es por medio de vocalizaciones, aunque no se conocen a profundidad. Tiene una llamada que suena como un chirrido muy intenso, pocas veces escuchado.
Reproducción
No existe una época del año específica en la que se reproduce, pues esto depende de las condiciones de la zona. Si el clima es agradable y hay buena disponibilidad de comida, la lechuza puede aparearse. Macho y hembra anidan en un agujero ubicado en algún árbol, el cual forran con madera blanda, tierra, arena u otro material que suaviza la superficie. La hembra deposita ahí de 2 a 3 huevos que son incubados por ella misma, mientras el macho se ocupa de buscar alimento para ambos.
La pareja reproductora defiende el nido de los intrusos y un rango de hogar de 500-1,000 hectáreas. Algunas parejas descartan los agujeros en los árboles y se instalan en grietas entre las rocas o en cuevas subterráneas, según sus necesidades. Cuando los polluelos salen del cascarón, son pequeñas criaturas sin plumas que necesitan de todo el cuidado de sus padres. Son alimentados hasta un mes después de que adquieren su plumaje.
Amenazas y conservación
Envenenamientos y colisiones con vehículos amenazan a la lechuza australiana.
Figura en la categoría “Preocupación Menor” en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, por lo que, globalmente, no se le considera una especie amenazada. Sin embargo, en algunas zonas de Australia su estado de conservación es un poco diferente. Por ejemplo, la subespecie de Tasmania, T. n. castenops, está en peligro de extinción en la isla, debido a la pérdida de hábitat.
Su hogar está siendo usado para establecer tierras de pastoreo, agricultura y silvicultura, y la quema de árboles disminuye el número de estos que puede usar para anidar. Otros factores que amenazan a la lechuza australiana son los envenenamientos por químicos usados para matar roedores, y las colisiones con vehículos.